21- Qué es un krama, un Vinyasa y un vyayama?

Krama

Purna Vinyasa Krama Yoga es un estilo creado por Swami Maitreyananda dentro del Yoga Integral. Krama es la secuencia o serie de Asanas, el Purna Yoga Integral en la tradición de Swami Maitreyananda tiene kramas o kramajis, unas 108 secuencias pre determinadas que se utilizan para enseñar y practicar, varios de esos kramajis son saludos o vyayamas que están dentro del estilo de yoga dinámico llamado Namaskar Yoga ®  creado por Swami Maitreyananda.

A modo de ejemplo, compartimos dos de los Kramas enseñados por Swamiji  Maitreyananda.

Vinyasa palabra en sánscrito que se divide en:

Nyasa- Santificar, lograr un estado meditativo mediante la concentración en un punto y a continuación liberar el punto de atención.

Vi- Colocar en una forma determinada de acuerdo a un contexto o falta de él. 

Se suele traducir como unión de movimiento y respiración.

Actualmente asociamos la palabra vinyasa a un tipo de yoga dinámico basado en la unión de movimiento y respiración a lo largo de secuencias de posturas (asanas) enlazadas entre sí.

En el mundo del yoga es difícil construir una trazabilidad histórica fiable. Nacido en una tradición eminentemente oral a veces no sabemos si lo que vemos y nos cuentan está basado en la rigurosidad o en la interpretación subjetiva. Como estilo de yoga, el vinyasa puede estar sujeto a la falta de rigurosidad que tienen otros estilos “tradicionales” de yoga. Sin embargo, el término Vinyasa aparece en un texto, ya desaparecido, llamado Yoga Korunta, atribuido al sabio Vamana Rishi. Dicho texto fue la base de las enseñanzas que Krishnamacharya, el padre del yoga actual tal y como lo conocemos, recibió durante siete años de su gurú Ramamohan Bramachari y que posteriormente el mismo Krishnamacharya enseñó a sus discípulos (BKS Iyengar y Sri K Pattabhi Jois entre otros) . Este texto enseñaba un hatha yoga vigoroso basado en vinyasas, bandhas (cierres energéticos) y drishtis (mirada).

Las secuencias de asanas que se crean en una clase de vinyasa yoga constituyen un excelente medio para explorar la sucesión de momentos producidos en una situación consciente que logramos a través de focalizar la atención en la unión de movimiento y respiración. Así pues, vinyasa puede ser una forma de yoga, pero también es el proceso consciente que ocurre de forma natural cuando ordenamos las circunstancias de forma adecuada.

La mayoría de las veces, en nuestro intento de alcanzar un estado meditativo o concentrar la mente en un punto, de forma espontánea empiezan a surgir fuerzas contrapuestas que impiden tal fin. El proceso de vinyasa permite pues que dichas fuerzas, contextos y perspectivas contrapuestas surjan, y en el momento justo, antes de que una narrativa empiece a iniciarse o divaguemos, introducir de forma consciente un elemento que equilibre y retome la dirección.

El ejemplo más obvio de vinyasa es el movimiento de inhalación y exhalación. Fuerzas opuestas de ascenso y descenso, de activación y relajación, de expansión y contracción. Cuando observamos de forma detenida este proceso, ambos patrones permanecen presentes de forma consciente en nuestro sistema nervioso y en nuestra conciencia, siendo testigos de la paradoja de la contradicción.

Con práctica, la mente encuentra la calma a través de la observación consciente de la aparición de fuerzas opuestas.

Aprendemos a estar concentrados y conscientes mientras soltamos cualquier expectativa de lograr un resultado concreto , rindiendo las demandas del ego al tiempo que calmamos la mente, todo siendo conscientes de la complejidad de lo que sea que acontece. Cultivando una mente abierta, inquisitiva y de aceptación en la controlada estructura de la práctica, el encuentro con las diferentes paradojas y lo desconocido empiezan a sentirse cómodos e interesantes en lugar de amenazantes. De forma gradual, los habituales patrones de comportamiento y pensamiento preconcebidos se disuelven y , de esta forma, nos hacemos más libres de los condicionamientos impuestos por la mente.

En la práctica de vinyasa yoga el cuerpo y la respiración son el vehículo y la herramienta de acceso a estados más profundos de autoconocimiento y conciencia. La práctica física dinámica ayuda a depurar el organismo, a crear ligereza y a evitar el estancamiento, tanto físico como mental ayudándonos así a adquirir una visión interna y externa clara y ecuánime.

Vyayama

La práctica de Vyayama es ancestral y está recomendada por la tradición Ayurveda. No es casualidad que fuera una disciplina utilizada por los antiguos guerreros y prohibida por los británicos, que temían sus beneficios en el pueblo hindú colonizado.    

En Sánskrito se traduce como “domar el aliento” y sus orígenes se remontan a miles de años, en la épica de los Vedas. El término Vyayama aparece en antiguos manuscritos, donde se habla de la vida que debe llevar un rey. Allí, simplemente significa “ejercitarse”, o “hacer ejercicio”.

Con el tiempo, vemos en otras referencias que se aplica a una disciplina practicada por guerreros y arqueros para mantenerse sanos y fuertes. También, posteriormente, se asoció con las danzas, el teatro y las artes marciales hindúes.    

Hoy en día, Vyayama es la denominación de lo que entendemos como yoga dinámico, implicando ejercicios que unen respiración y movimiento.

Este tipo de yoga no es un método, sino un estilo que se puede aplicar a distintas escuelas y técnicas. Consiste en ejercicios sin una relajación mediante, y cuya transición entre uno y otro se realiza uniéndolos con una secuencia concreta.

Su principal objetivo es el dominio de la respiración y el movimiento. De esta manera se aprende a dosificarlo de acuerdo a nuestra necesidad, y a equilibrar la energía que proviene del aire a través de la respiración.

El principio básico del Vyayama es que todo movimiento tiene origen en la respiración, y la coordinación de ambos es lo que libera nuestro ser.

Mediante estos ejercicios, se puede lograr el equilibrio de los doshas, tan necesario para nuestra salud personal. Por eso se ha extendido tanto, permitiendo que personas de todas las partes del mundo disfruten de sus beneficios a través de la meditación dinámica, la gimnasia energética o las artes marciales.

Beneficios de Vyayama

Mediante la práctica de Vyayama, pondremos en movimiento todas las partes que constituyen nuestro físico, mediante el uso de la respiración. Sin embargo, aunque parezca una disciplina meramente externa, conlleva una liberación de los canales por donde fluye la energía que nos mantiene saludables y en armonía.Realizando las posturas de yoga o asanas de manera dinámica, estamos involucrando en esta acción todo nuestro ser. Si no existe una relajación entre ejercicio y ejercicio, es porque la misma postura es de descanso para el cuerpo. Así, no sólo estaremos usando el cuerpo, sino que es posible la concentración que implica también una ejercitación de la mente.                                          

Con el manejo de la energía del aire, vas a canalizar el prana para lograr el equilibrio de los doshas. Esto incide en tu salud de forma directa, brindándote bienestar y ayudándote a expresar tu fuerza y vitalidad.

Esta “gimnasia ancestral” te proporcionará armonía entre el cuerpo y la mente, fortaleciendo todos tus músculos y tendones. La gran beneficiada será tu columna, que estará liberada de tensiones innecesarias y logrará la elasticidad que necesita.

Con la oxigenación que obtienen tus células, tu sistema óseo, los tejidos más profundos del cuerpo y los órganos recuperarás el vigor y la potencia que de forma natural, tienes como ser humano.

Reglas básicas del Vyayama

1. El movimiento siempre debe estar coordinado con la respiración.

2. La atención debe estar en la respiración y el movimiento del cuerpo practicando una concentración enfocada únicamente en estos aspectos.

3. La respiración es sonora y tiende a moverse a través del interior del cuerpo albergando toda su capacidad al completo.

4. Los movimientos están unidos y ligados unos a otros, son secuencias armónicas y fluidas.

5. Los movimientos son circulares, orgánicos y de expansión corporal.

Existen tres tipos de Vyayam. 

1- El primero, es el sutil y en sánskrito se le define como Sukshma Vyayam. Es totalmente energizante y aparentemente se puede ver con movimientos muy dinámicos y de apariencia ligera.

2- Por otro lado, tenemos el Sthula Vyayam o Vyayam dento, que es más estático que el anterior y visualmente no se ve tan enérgico, ya que mueve el prana más a nivel interno.        

3- Y por último está el Vyayam mental o también conocido como esencial, del sánskrito Karana Vyayam. Es muy psíquico y puede apreciarse una energía especial entre sus practicantes.